De cambio en cambio
En mi dilatada carrera en la comunicación, dedicado al arte y espectáculos, he podido ser testigo de los cambios experimentados desde las últimas tres décadas del pasado siglo, hasta el presente.
A partir del 2000 el más significativo ha sido el ver cómo la diáspora es la que está aportando a las principales figuras del arte, con dimensión internacional.
Podemos ver cómo Romeo Santos y Prince Royce son los vocalistas masculinos de ascendencia criolla de mayor popularidad.
En el ámbito femenino figuras como Cardi B, Natti Natasha hacen lo propio en el género de la música urbana.
Zoe Saldaña en el cine, en tanto que en la radio contamos con figuras cimeras como es el caso de Janeiro Matos y Alipio Coco Cabrera.
En la televisión se verifica con Mariela Encarnación y la doctora Nancy Alvarez.
Y así como ellos, hay muchas otras figuras que se destacan desde la gran carpa.
Todos tienen en común que han desarrollado su talento y capacidad de trabajo fuera del lar nativo, en un mercado muy exigente y competitivo, en el que converge gente de todas partes.
En el pasado también contamos con figuras internacionales de gran relieve que se cimentaron desde el extranjero, y el fenecido Johnny Pacheco es un ejemplo de ello.
Pero en el presente es que con mayor diversidad y vigor se deja sentir la impronta de los dominicanos en el arte y la comunicación desde playas extranjeras.
Los denominados “dominican york” del pasado, son los que ahora sacan la cara por la dominicanidad en el arte y la comunicación en tierras lejanas.
El cambio es apreciable y notable.