Juan Lopez
Los principales componentes del escenario político para la R. Dominicana (RD) que se vislumbra para el 2024, de acuerdo a nuestra reflexión son:
- El proselitismo político y los resultados de las primarias o convenciones que se realizarán, en octubre de este 2023, serán determinantes para las elecciones del 2024.
- Una férrea competencia entre tres bloques de las fuerzas que se formarán alrededor del PRM, PLD y FP.
- Los resultados de las elecciones municipales, del 18 de febrero, repercutirán en las elecciones congresuales y en la primera vuelta de las presidenciales, el 19 de mayo de 2024.
- Como consecuencia directa de los resultados de la primera vuelta, tendremos la segunda vuelta para decidir las presidenciales. el 30 de junio de 2024.
Ese escenario y los antecedentes electorales en RD evidencian como mayor probabilidad que ninguno de los tres principales partidos podrá ganar solo, sin alianzas. Ante ese panorama, las cúpulas y estrategas del PRM, PLD y FP están compelidos a diseñar e implementar, en este 2023, las mejores alianzas electorales posibles.
Presionado por esa situación, el PRM-gobernante está buscando con frenesí garantizar la reelección en la primera vuelta, para lo cual tratará de “conquistar” a la mayoría de los partidos pequeños. Para las elecciones de 2020, el PRM formó un bloque con 6 partidos. Ahora pretende “aumentar las conquistas” de otros 4 partidos para llegar a diez o más aliados, ya que no pudo reducir el porcentaje constitucional (50 + 1) para ganar en primera vuelta. ¿Segunda vuelta? ¡Pánico en el PRM!
Aunque en política nada es absolutamente imposible, descartamos las alianzas PRM-PLD, no obstante las diversas especulaciones que surgieron con la reciente reunión de los expresidentes Hipólito y Danilo. Ahora también se descartan acuerdos electorales PRM-FP.
En los pasados comicios el PLD formó alianzas con 10 diferentes partidos, mientras que la FP lo hizo con 5, incluyendo al PRM para algunos alcaldes y senadores. Por las “aspiraciones y estrategias” de los partidos pequeños, será muy difícil la repetición de esos dos bloques. Más bien serán diezmados por la succión del “imán gobierno-PRM”.
Así las cosas, en importantes sectores del PLD y FP se avizoran sentimientos de acercamientos políticos. Dichas aproximaciones se fundamentan en estos criterios:
- Las contradicciones PLD-FP no son ideológicas ni antagónicas.
- Por separado al PLD y FP le será muy difícil ganar las elecciones municipales y la primera vuelta presidencial.
- Tienen coincidencias programáticas y experiencias compartidas entre dirigencia y candidatos de ambos partidos.
- Sus líderes tienen vocaciones de poder y voluntades políticas a favor de los mejores intereses del pueblo.
- Esa alianza sería un verdadero “ganar, ganar” para el presente y futuro del PLD y FP.
Entonces, la cuestión es cómo implementar la carpintería para una alianza PLD-FP que, reflexionando con actitudes positivas, la visualizamos en la siguiente fórmula:
- Acuerdos de candidaturas comunes para alcaldes y directores de distritos municipales. También para senadores. Se establecerán mecanismos y procedimientos para identificar los candidatos más idóneos.
- En la primera vuelta presidencial, PLD y FP participarán con candidatos por separado.
- La alianza contemplará que, para la segunda vuelta, el candidato presidencial que llegue en primer o segundo lugar recibirá el respaldo de la otra fuerza.
Por razones obvias, desde el gobierno y PRM se tratará de impedir la alianza electoral PLD-FP. Inclusive, en ambos partidos habrá uno que otros dirigentes miopes y sectarios que tratarán de obstaculizar la materialización de tan importante y progresista acción política.
Frente a los posibles intentos de esos dos sectores, la mayoría de los dirigentes, militantes y simpatizantes del PLD y FP levantarán los principios y propósitos del boschismo, subordinarán los intereses grupales y personales a los más sanos intereses del pueblo dominicano. Y con optimismo y perseverancia política se trabajará a favor de la alianza electoral PLD-FP para beneplácito de nuestras presentes y futuras generaciones. ¡Ojalá así ocurra!
Porque así y solo así, “el camino malo”, representado por el reeleccionismo PRM-Abinader, quedará definitivamente cerrado. Y los hijos del boschismo (PLD-FP) retomarán la conducción del poder para enrumbar al país por senderos de progresos, modernización y bienestar social a la RD.